EL HOMBRE QUE CAYÓ A LA TIERRA (1976)

No podemos comentar tal propuesta fílmica, pretenciosa y espesa como pocas, sin insultar al responsable antes, llamándolo abusón o hijo de su madre, suavizando mi lenguaje.
Un extraterrestre (David Bowie, que ya lo parece, sin arreglos ni maquillaje) viene a la Tierra en busca de agua para su familia, pero se verá atrapado por la condición humana y sus consecuencias, tales como el alcohol, el sexo, la codicia....viéndose afectado de una forma poco convencional, podríamos decir.
Sé que hay mil y una preguntas al respecto, y ya os adelanto que yo no tengo las respuestas. No seáis cobardes, y darle al play ante semejante castigo cinéfilo.
Me he quedado realmente atónito, perplejo y cansado de ver este
filme considerado "de culto", y aún me pregunto el por qué, suponiendo que es debido a que su visionado es realmente difícil y no sigue ninguna estructura argumental a la que estemos acostumbrados, distrayéndonos con suma facilidad con detalles de menor importancia, como el pelo teñido de Newton (Bowie), su esquelético cuerpo o sus escenas de sexo voyeur
El desarrollo visual es molesto en general, descubriéndote con cara de tonto ante escenas surrealistas, sin sentido alguno, o bien totalmente estúpidas de las cuales he conseguido olvidar segundos después de los créditos.

Los personajes son de pitorreo, nadie se toma en serio a nadie y acabas por sentirte como ellos, cerrando los párpados antes de tiempo como en mi caso (sí, confieso haberme perdido algunos minutos, por salud básicamente).

El alienígena en cuestión se trastoca más de lo que estaba, emborrachándose y practicando sexo tántrico a base de bien, desaprovechando metraje gratuitamente y haciéndonos perder el tiempo a nosotros en el sofá.

la familia extraterrestre, por decir algo

Cineastas de talla dudosa, pretenciosos y visionarios hay muchos, pero darle una buena puntuación a este producto sería engañarme a mí y aburriros a vosotros, así que...
Además, contiene ese alargado metraje de más (un total de 139 angustiosos minutos) que la hacen del todo insoportable y agónica. Por nombrar algo positivo del filme, diría que argumentalmente a veces es interesante, pues la premisa de que un alienígena con la cara de David venga y se forre vendiendo sus aparatos tecnológicamente avanzados es buena, y que se perturbe por nuestros vicios puede tener lecturas bien distintas, pero en un envoltorio tan pedante, solo nos incita al insulto.