H (2002)

Thriller surcoreano aún inédito en España que recuerda en atmósfera al excelente film de David Fincher, Seven, y en cierta estructura argumental a la aclamada El Silencio de los Corderos, incluso con algún toque más sutil a Instinto Básico, con psiquiatra calentorra incluida, si se me permite.
Todo da comienzo con la aparición del cadáver de una mujer y su bebé en un mugriento vertedero coreano. Según parece, alguien está cometiendo asesinatos en serie de la misma manera que Shin Hyun, un famoso homicida de mujeres del país que (inesperadamente) se entregó hace algunos meses y ahora espera su pena de muerte en prisión.
Su modus operandi se repite al milímetro ahora en manos de otro criminal que secuencialmente liquida a mujeres embarazadas o relacionadas con el aborto, tal y como hacía Hyun.
La investigación del extraño caso correrá a cargo de los detectives Kang (un temperamental guaperas de maneras poco ortodoxas, o sea, el Brad Pitt de Se7en) y Kim, una atractiva y fría mujer con un pasado oscuro que se tomará el caso de una forma demasiado personal.
Ambos visitarán al célebre preso para sonsacarle información acerca de los terribles sucesos, pero se toparán con un enigmático y filosófico asesino del todo desquiciado, algo así como un Hannibal Lecter coreano (sin rastro del carisma de aquél, claro), que a base de divagaciones existenciales les dará pistas sobre quién puede ser el presunto copy-cat (imitador).
Poco a poco, Kim y Kang irán descubriendo la verdadera naturaleza del caso que deben afrontar, y que acabará por salpicar sus vidas hasta quizás, convertirlas en un infierno.
Lo más acertado de "H" es su intencionabilidad, abordando un argumento con muchas posibilidades (asesino emulando a otro por razones misteriosas) y con cierto atractivo atmosférico que, por desgracia, no se resuelve con la eficacia que hubiese podido. La investigación sufre un exceso de diálogo en sus primeros minutos, lo que propicia nuestros primeros bostezos y hace decaer nuestro interés. Por si eso no fuera suficiente, la actuación de la inexpresiva Jung-ah Yum encarnando a Kim, es insuficiente para que nosotros captemos la verdadera angustia de su pasado, y se pierde un gran fuelle emotivo en pantalla (en el guión funcionaba mucho mejor, estoy seguro).
Su compañero de fatigas, Kang y el preso Lecteriano no son una excepción. Ambos juegan a estar estáticos hasta que repentinamente brota en ellos alguna que otra brusquedad sobreactuada, todo demasiado falso.
Tampoco salvaré a la psiquiatra que les "ayuda", una mujer que pasea un par de vestidos caros y pretende ser intelectualoide, vamos, una carga más al ya de por sí mediocre reparto.
No dejaré de comentar un detalle que me ha parecido del todo inadecuado, y es que cuando nos mostraban a Kim en pantalla (muchos primeros planos) de repente suenan unas teclas de piano tratando equivocadamente de contagiarnos su tristeza. Un recurso crispante y del todo amateur.
Si nos olvidamos de las interpretaciones (sálvese quién pueda), de la música, de la media docena de redadas policiales que inundan la trama (cada vez que buscan acción, pues eso...otra redada más), y de su fallido intento de interiorizar en nosotros, aún podemos disfrutarla.

Contiene escabrosidades interesantes (a ver si el loco voy a ser yo..), como mutilaciones, estrangulamientos y asesinatos espantosos que están bien detallados, incluso me atrevería a decir que las secuencias macabras son lo mejor del film. Presenciaremos un interrogatorio a media película que, interés argumental aparte, muestra como un detective ahostia "realmente" al detenido, dándole una docena de guantazos en la testa que incluso nos duele a nosotros.
Por último, soy partidario de pensar que sobre la mesa el film tenía mejor pinta; con un asesino en serie de mujeres embarazadas frío y despiadado que nos sorprende con un desenlace final inesperado y que nos hace comprender de una vez el porqué de su título. De hecho, la "H" únicamente cobra sentido cuando nos explican qué ha pasado y cómo.
Dificilmente recomendable, se trata pues de un thriller menor que demanda nuestra mayor indulgencia para perdonarle sus errores, pero que puede llegar a suscitar interés debido a su planteamiento y desarrollo. Lástima del reparto y de algunas manías del rodaje desacertadas.
Nota para los más cinéfilos:
No dejéis de ver el opening alternativo que hay en los extras del dvd, del momento en que Hyun se entrega a la policía, digno de presenciar.