martes, 23 de agosto de 2011

PUMPING IRON (1977)

Documental ya mítico sobre el mundo del culturismo (de competición) que año tras año ha ido ganando tantos adeptos y seguidores que ha llegado incluso a convertirse en una pieza de auténtico culto especialmente para el público entregado a la disciplina del hierro. Todo comenzó a mediados de los 70 cuando George Butler, un fotógrafo británico, decidió documentar el mundo que encerraba el culturismo y sus entresijos, pero se topó inesperadamente con un personaje de un carisma inconmensurable, Arnold Schwarzenegger.
En primer lugar siguió de cerca el certamen de Mr. Universo de 1975, donde Ken Waller nos enseñaba cómo distraer la concentración de sus rivales escondiéndoles las camisetas (el pobre Mike Katz aún la está buscando) y acabar ganando la prestigiosa competición no únicamente gracias a su imponente físico, sino también debido a su estrategia competitiva.
El sorprendente montaje del film consigue intercalar historias muy personales, como la de Arnold, un chico austríaco de 28 años (1,88 y 109kg) que ya tenía sobre sus hombros cinco Mr. Olympia (el torneo por excelencia que creó Joe Weider donde sólo participan los mejores) y que ese año pretendía conseguir su sexto consecutivo.
Lou Ferrigno, un chico de Brooklyn que mediante el culturismo escapó de sus frustraciones, ya que era el nerd con problemas de audición que acabó siendo el Increíble Hulk y que resultaba el culturista más grande hasta la fecha con sus 125 kg en 1,95 de estatura, o el italiano Franco Columbu, un halterófilo / boxeador con un récord Guiness a sus espaldas, pues era capaz de reventar una bolsa de agua caliente inflándola con sus propios pulmones.
El seguimiento de sus entrenamientos hasta desfallecer (sesión de sentadillas completas entre Arnold y Ed Corney, legendaria), su alimentación, sus objetivos y sus capacidades de auto superación son perfectamente recogidas en este documental independiente que rescató la sub-cultura del body building hasta hacerla llegar al gran público (su estreno en Cannes fue pletórico). Desde los memorables títulos de crédito iniciales, donde Eugene Sandow aparece en pantalla para mostrar el culturismo de principios de siglo hasta el final del film, nos veremos absorbidos por el contagioso carisma de Arnold y su perspicaz modo de ganar la competición, con una asombrosa seguridad en sí mismo y una casi petulante manera de competir, llegando incluso a la trampa para hacerse con el título. Su carácter ganador y su genética superior le facilitan su arrolladora personalidad, y ejemplifica el ingenuo "american dream" que muchos persiguen a ciegas y que en este caso él sí consiguió. Con sólo observar su llegada al californiano Gold's Gym y como logra acaparar las miradas de todo el mundo presente nos podemos hacer una idea de su desbordante presencia, despertando una mezcla de envidia y admiración que incluso nos motiva a entrenar duramente a nosotros, acomodados espectadores. Su capacidad de intensidad en los entrenamientos forma parte de la historia del culturismo, y aunque actualmente haya decenas de monstruos más fuertes que él, nadie ha combinado tan bien estos elementos; la genética, el carisma y la citada intensidad en los entrenamientos, motivada por una auto suficiente capacidad para el esfuerzo y superar los límites personales.
La parte final de film muestra como todos los mejores culturistas se desplazan a Pretoria (Suráfrica) para competir en el Mr. Olympia de 1975, dividido en dos categorías, por debajo y por encima de 90 kg.
Seremos testigos del mejor posador de todos los tiempos (Ed Corney), del frustrado campeón francés Serge Nubret (se comenta que hubo una artimaña por parte de Joe Weider para que no llegara en buena forma física, ya que lo consideraba un rival demasiado fuerte para Arnold) y de las explicaciones de Schwarzenegger acerca de sus estratégicas formas de competir.
Un excepcional film que recoge como ninguno la época dorada de esta disciplina deportiva que tan dividido tiene al público, que como bien dice Arnie, hasta que no se conoce, no se entiende.
Destapando mi parte más objetiva puedo advertir una falta de ritmo allá por la mitad de la cinta, donde la atención se enfoca más en competidores de menos interés, como Mike Katz o Ken Waller, o la falta de aliciente que puede tener si no eres un amante del género.
También la trama que nos quisieron colar entre medio, como la sospechosa pasividad de Arnold ante la muerte de su padre (en realidad, fue a verlo antes de morir) o ciertos toques de guión tramposo ensucian un poco el global, pero que con el tiempo, acaban resultando graciosos y todo.
En todo caso, las aspiraciones del ser humano, sus distintas capacidades y caracteres (evidenciado por el contraste entre Lou y Arnold, la cara y la cruz), y la conquista de tus sueños son suficientes excusas como para darle una oportunidad a esta película documental. 35 años después mantiene intacta su capacidad de magnetismo y sigue animando y motivando a millones de deportistas a conseguir sus objetivos, hecho que resulta insólito en el mundo del culturismo y que debe ser merecidamente reconocido. La edición en DVD de su 25 aniversario (circuló varios años en VHS en condiciones underground) es realmente aconsejable, ya que recupera metraje inédito, un documental sobre Schwarzenegger y recoge el momento de re-agrupación muchos años después de todos los protagonistas, con un Arnold ya Gobernador llegando a lo grande.
Actualmente algunos ya no están entre nosotros, como Serge Nubret, en coma desde marzo de 2009 y recientemente fallecido el pasado 19 de abril de 2011.
En resumen, un espléndido film, ya de culto, que agrupa a una generación irrepetible de deportistas y que consiguió plasmar la magia de esa época, siendo un verdadero tesoro para el que aquí escribe.
Acabaré mi escueto análisis con una frase de Arnold en la película que lo define todo : -Para mí, es tan satisfactorio como un orgasmo- lo dicho, no perdáis más tiempo y haceros con ella.

5 comentarios:

  1. De regreso de unas vacaciones geniales en Suecia, me encuentro con pocas ganas de escribir, pero esta película merece un rato de mi atención. En primer lugar por lo que nos costó conseguirla hará unos 15 años si te acuerdas, tras mucho tiempo tras ella me hice con una mala copia en VHS que ni traía subtítulos como el DVD, es una de esas cintas que al igual que me ha ocurrido en alguna ocasión con Rocky IV, me han animado a entrenar o intentar volverme a meter en el deporte del hierro (aunque ultimamente no creo que fueran motivación suficiente), un documental deportivo que va más allá del bodybuilding y que merece un visionado. Inolvidable la sesión de pose de Lou Ferrigno "both arms Lou..." ^^ o algunas frases para el recuerdo: "if you are training hard he is training harder..." Sí, un merecido 8 en mi memoria, algún día tendré que revisionarla. Me ha sorprendido que no hicieras mención a la nefasta Pumping Iron II...

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  2. En mi opinión, Pumping Iron II fue más que un fracaso, fue un despropósito sin magia alguna que hizo más daño que otra cosa al culturismo femenino. De todas formas, intentaré conseguir una buena edición del Total Rebuild (The Comeback) donde Arnold volvía al Olympia en el 80, tras haberse retirado. La recuerdo vagamente y necesito verla de nuevo.

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  3. The comeback... ummmm no tengo claro si la llegué a ver entera, mira que te digo. Sí, estaría muy bien ponerla también.

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  4. https://www.youtube.com/watch?v=A5LVDYbLONY

    En este enlace podéis encontrarla en español.

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    Respuestas
    1. Gracias Mario, aunque visto el doblaje que le han hecho (y que desconocía), recomiendo verla en versión original sin duda alguna.

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