
Este viernes 16 de diciembre se proyectaba en el Cine Urgel de Barcelona englobada en una sesión doble junto a otro de los pesos pesados del cine de los 70, Tiburón. Por lo que la ocasión era única para ver por fin en pantalla grande esta gran película, y vaya si valió la pena la experiencia, con un ambiente de lujo y 1800 personas aplaudiendo a rabiar desde los títulos de crédito hasta las escenas más famosas. Aunque me imagino que todos nos la sabemos de memoria, vamos a recordar un poco el argumento: La tripulación de la nave minera Nostromo se encuentra de regreso hacia la Tierra en estado de hibernación tras haber acabado su misión de recolección de minerales en el planeta Thedus. Madre, el ordenador de a bordo, despierta a los siete tripulantes dejándoles desconcertados al darse cuenta que están en una Galaxia muy lejana y todavía a varios meses de llegar a casa.
La explicación que reciben por parte de Dallas, el comandante al mando de la nave, es que Madre ha captado una señal de radio que se repite continuamente proviniente de un pequeño planetoide cercano, por lo que deben bajar a investigarla.
A pesar de las reticencias del grupo, entre Dallas y Ash, el comandante médico de la nave, les acaban convenciendo para que colaboren bajo pena de perder todos sus ingresos. La expedición enviada para localizar el origen de la señal no da crédito a lo que se encuentran una vez allí, una nave extraterrestre que parece llevar muchísimo tiempo en el planeta.El éxito de Alien no se puede achacar a un único motivo, sino a la suma de varios puntos que se conjuntaron a la perfección para llegar a darle su identidad tan y tan personal. Para empezar el hecho que la protagonista sea una mujer, con una Sigourney Weaver en uno de sus mejores papeles dando vida a la ya mítica Teniente Ripley, personaje de gran carisma que rompía moldes en un mundo dominado por los héroes masculinos. Otro es la lograda atmósfera claustrofóbica, agobiante y opresiva que se respira dentro de la nave Nostromo, consiguiendo crear una gran inquietud en cada escena, pues los interiores de la nave parecen esconder amenazas en las sombras, en cada rincón de sus enmarañadas tripas, a punto de saltar encima de cualquiera que se atreva a adentrarse en ellas. Y obviamente no nos podemos olvidar del inquietante alienígena, una criatura de impecable y elegante diseño, tan mortal y escalofriante como pocas hemos podido ver en el cine, con características que lo hacen un hito de la ciencia ficción, desde su sangre ácida, su modo de incubación, su desarrollo hasta la forma adulta o su increíble instinto de supervivencia convirtiéndole en un enemigo casi invencible. El diseño de la criatura, así como el de las naves, los interiores de estas, junto con el relieve del planetoide donde aterrizan, son obras del pintor surrealista Hans Ruedi Giger, con una estética muy particular y perfectamente identificable. Un bicho que creó escuela desde entonces, habiendo sido fuente de inspiración en el mejor de los casos y de burdas copias en muchos otros.
Hay momentos que son imborrables a lo largo del film, como cuando el parásito sale del huevo o el nacimiento de la criatura al reventar el pecho de John Hurt, en una escena que desprende un gran realismo en las reacciones de los actores, pues a excepción de Hurt que obviamente sabía que iba a pasar, el resto del reparto presente en la escena desconocía lo que les esperaba y el susto que se llevaron fue tremendo, pudiendo verse por la expresión de sorpresa en sus caras. Para mí la parte inicial con el despertar de la tripulación, el travelling que hace la cámara por sus pasillos desiertos y la música de fondo (espectacular también este apartado), son de lo mejor que recuerdo en cuanto a saber crear una ambientación que te va inquietando y dando mal rollo. Un gran ejemplo de como mantener una tensión continua desde el primer minuto hasta los créditos finales, en una película inolvidable y que no puede faltar en la DVDteca de todo amante de la ciencia ficción. La saga tuvo tres secuelas, y hay rumores que apuntan que podremos volver a ver a la Teniente Ripley enfrentándose de nuevo a sus peores pesadillas. También se explotó el cruce con otros de los grandes cazadores del Universo, los Predators, en una saga que ha dejado bastante que desear en cuanto a lo que podía haber dado de sí.Os dejo los links de las otras críticas hechas de la saga Alien en el blog:
ALIENS, EL REGRESO (1986)
ALIEN 3 (1992)
ALIEN RESURRECCIÓN (1997)


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