LONE WOLF & CUB 4: BABY CART IN PERIL (1972)

Cuarta entrega de las aventuras de Itto Ogami y su hijo Daigoro, obligados a seguir el llamado Camino del Infierno, marcado por su búsqueda de venganza por el asesinato de su esposa y el descrédito sufrido al haber perdido la confianza del Shogun que le cree un traidor por culpa de las pruebas incriminatorias puestas por parte del clan Yagyu (quienes optaban al puesto que Itto ocupaba hasta entonces como verdugo del Shogun).
Mientras tanto Itto continúa alquilando su espada a todo aquel que pueda permitirse la desorbitada cifra de 500 Ryo y acabando con las víctimas señaladas por sus clientes. En esta ocasión recibe como encargo asesinar a la renegada Oyuki, una experta  luchadora con el cuerpo tatuado que abandonó su clan sin permiso.
La película juega habilmente con una narración plagada de flashbacks, permitiendo poco a poco ir atando cabos, y conocer el pasado y motivaciones de muchos de los personajes principales que hacen su aparición aquí. De esta forma podremos saber porque Oyuki abandona el clan aún a sabiendas de que esto implica su destierro y que se la busque para acabar con su vida; o que le ocurrió a Gunbei, un samurái del clan Yagyu caído en desgracia tras perder tiempo atrás con Itto el duelo que le hubiera permitido ser el brazo ejecutor del Shogun, obligado a exiliarse por exigencia del Retsudo, el jefe del clan, desde entonces solo tiene una cosa en mente, enfrentarse a Itto para acabar con su vida.

Oyuki, despachando uno a uno todos los que quieren darle muerte...

Padre e hijo rezando en el templo.

Y obviamente, los Yagyu no se quedan de manos cruzadas, mandando un contingente de hombres impresionante apostando por un enfrentamiento definitivo contra Itto, quien solo cuenta con su habilidad como luchador y el carrito plagado de armas sorpresivas...
El film es fiel a la estética del manga escrito por Kazuo Koike y dibujado por Goseki Kojima, del que se editaron 28 tomos, siendo un enorme éxito de ventas en Japón y más allá de sus fronteras, de esta forma sus señas más identificativas son unos combates plagados de cercenaciones brutales, donde la sangre baña cada una de las escenas, exagerada hasta la teatralización como auténticos surtidores.

Sin brazos ni piernas pero dispuestos a seguir luchando... eso es un Ninja...

Quizás las mejores escenas estén en su parte inicial, la primera de ellas con Oyuki con el torso desnudo y tatuado, liquidando sin problemas al grupo enviado para darle muerte, para acabar con todo el pecho manchado de sangre; o la fantástica escena en el templo, donde Itto se ve sorprendido por un grupo de asesinos que camuflados como estatuas del tiempo intentan acabar con él, regalándonos una serie de muertes brutales, donde ninjas con varios miembros amputados siguen dispuestos a lograr su cometido sea como sea. Tampoco se queda corta la larguísima escena en la que un ejército de los Yagyu ataca sin tregua a un exhausto Itto, con muertes para todos los gustos.

Un rival terrible con su espada de fuego

Me ha gustado que tengan un buen detalle con el personaje de Daigoro, quizás poco agradecido al tener poco protagonismo en las distintas películas, en la mayoría de casos nada más que el estar tranquilamente sentado en el cochecito mientras su padre lo empuja por los caminos, pero que aquí se le dedican unos minutos primero con una canción y luego con una voz en off, donde se nos viene a decir que se ha acostumbrado a la soledad cada vez que su padre se marcha a cumplir con alguno de los encargos para el que es contratado, convirtiéndose así en un personaje casi imperturbable a todo mal que le amenace, resignado casi con certeza a que en cualquier momento les llegará la muerte, cosa que queda demostrada en la escena del incendio en la que se ve envuelto. En general creo que esta es la mejor de las entregas que he visto hasta ahora, quizás la que tiene una mejor estructura narrativa y la que más se centra en la trama principal de las motivaciones que llevaron al clan Yagyu a cebarse tan cruelmente en la figura de Itto, todo ello sin que la acción pura y dura se vea mermada en ningún momento, es más, podría ser la que más acción tiene. Un muy buen entretenimiento de tan solo 80 minutos, que hará las delicias de todos los seguidores de la saga y a los amantes de las cintas de samuráis.

Aquí tenéis las otras entregas comentadas en el blog:

LONE WOLF & CUB 1: SWORD OF VENGEANCE (1972)
LONE WOLF & CUB 2: BABY CART AT HE RIVER STYX (1972)
LONE WOLF & CUB 3: BABY CART TO HADES (1972)