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domingo, 21 de agosto de 2011

UNA HISTORIA CASI DIVERTIDA (2010)

Situar una comedia en el interior de un psiquiátrico puede ser una gran idea si se conduce con ingenio y logra causar grandes expectativas en el espectador, que se imagina un desfile de hilarantes personajes insanos actuando constantemente como tarados y ofreciéndonos momentos divertidos. Esta "It's kind of a funny story" juega esa carta,  pero acaba resultando menos entrañable de lo que aparentaba (por lo que he podido ver, sobrevalorada en muchas webs).
Craig (Keir Gilchrist) es un adolescente de 16 años que piensa mucho en el suicidio como única vía para terminar su constante padecimiento, y es que está tan lleno de dudas existenciales que se ve inmerso en una depresión galopante. Su particular ingreso en el departamento de psiquiatría de un hospital le llevará a conocer a los enfermos que, cada uno a su manera, intentan vencer sus miedos  y superar sus angustias personales. Su mentor más cercano, Bobby (un agotador Zach Galifianakis) será el encargado de tutelar a Craig ofreciéndole discutibles lecciones sobre cómo salir adelante en condiciones.
Como es habitual, hay una chica, y otra chica, y amigos petardos, y una familia desligada... bueno, tópicos por doquier que sitúan a esta comedia con toques dramáticos dentro del saco de películas del montón que uno consigue aguantar bien pero sin nada que destaque en particular.




Tenía la sensación que copiaba mucho de cualquier capítulo de la divertida serie Scrubs para realizar una especie de episodio piloto de hora y media con el mismo tratado al humor pero con mucho menos acierto que aquella, que sin duda, es una serie de humor muchísimo más divertida. Sus buenos momentos son contados, pero no por eso hay que pasarlos por alto ni mucho menos. Secuencias hilarantes como la versión del Under Pressure de Queen (de lo mejor), los sueños extrañísimos de Craig o sus vivencias de adolescente con stop framed incluído arrancan risas que siempre vienen bien, pero se entremezclan con escenas que fuerzan profundizar y nunca lo consiguen. Esos 5 días que nuestro protagonista pasa ingresado encienden acertadamente el film, combinando humor con pequeñas dosis de drama (suicidios, drogas) pero sin lograr suscitar empatía en ningún personaje ni actor / actriz. Por momentos peca de aburrida e incluso de superficial, pero su innegable esfuerzo por constatar las ganas de vivir de Craig levanta un poco los ánimos al respetable, que sale casi complacido del visionado. Las partes donde intentan ahondar en la mente de Craig, tanto la odiosa psiquiatra como los compañeros de locura del mismo, son innecesarios, ya que nosotros ya entendíamos la fácil psicología cambiante de Craig, y consigue que nos sintamos cansados de oír siempre lo mismo. Debo rescatar, sin ningún género de dudas, la impresionante toma falsa (outtake del DVD) en el comedor del hospital. Dando rienda suelta a su imaginación, tres actores (Zach y dos más) improvisan tan alegremente su guión que resulta tremendamente divertido, acaparando mis carcajadas por completo en 5 minutos que dura la secuencia. Lo mejor de su visionado, y ni tan siquiera es parte del film.
En fin, una comedia ligeramente entretenida con pocos aciertos (aunque los hay) y un despliegue agotador de conceptos psicológicos demasiado básicos. Con todo y con eso, se puede llegar a disfrutar con incluso algunas sonrisas.

2 comentarios:

  1. A Zach Galifianakis solo le aguanto en Bored to death donde está muy divertido, en pelis como resacón en las Vegas y del estil, no me convence nada.

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  2. Qué mania le tienes a Resacón en las Vegas !!! Te sorprendería si la vieras, resulta simpética.

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