PAGES

lunes, 19 de septiembre de 2011

PIRATAS DEL CARIBE 4: EN MAREAS MISTERIOSAS (2011)

Tras casi 8 horas de piratas caribeños (sumando la primera trilogía de Gore Verbinski) me he vuelto a subir a la atracción de feria que ha resultado esta cuarta parte, o como prefieren decir sus productores, la primera de una nueva trilogía. Habéis leído bien, aún nos quedan alrededor de 7 horas más de abordajes y cañonazos sin piedad para el espectador adulto, que es capaz de aguantar un par de horas de un inspirado Jack Sparrow, pero que no busca una sobredosis de aventuras agotadoras, al menos en mi caso.Esta cuarta parte tiene el dudoso honor de ser la más "cortita" de todas, nada más y nada menos que 141 minutazos de nada, que comparado con los 150 ó 160 minutos de aquellas, nos han hecho incluso un favor.
El encargado de este sufrimiento ha sido Rob Marshall, que al parecer ha bajado el listón comercial, o bien por cansancio global de la saga o bien por la baja calidad de la misma. Aunque las dos pueden ser ciertas a la vez, no cabe duda.
El reencuentro de Jack Sparrow con su antiguo amor, Angelica, no parece ser fruto de las casualidades. Ella busca desesperadamente la Fuente de la Juventud y usará todas sus artimañas para conseguirla. Jack será capturado entonces por el temible Barbanegra, que le obligará a formar parte de su tripulación en esa búsqueda tan peligrosa y repleta de enemigos en la que se ve envuelto gracias a su ex-amante.
El capitán Sparrow deberá descubrir pues si Angelica es lo que dice ser y si Barbanegra es lo suficientemente benevolente como para dejarlos con vida, además de localizar la ansiada Fuente de la Eterna Juventud en las desconocidas y misteriosas lejanías del océano..
La sucesión de aventuras ya está servida. Un aluvión millonario de efectos especiales y mareantes batallas acaban con una paciencia que estaba en las últimas, y nos recuerdan aquella frase tan adecuada que reza...Lo bueno, si es breve, dos veces bueno.
El desarrollo del film es de manual. Tras unas secuencias de conversaciones pseudo-graciositas vienen unas secuencias de acción donde todo explota, todo cae y todo se destroza pero que no dejan ver ni gota de violencia desmesurada ni rastro de sangre, amén de no encontrar insultos soeces, ¡Ni se les ocurriría a estos cultos bucaneros de alto copete el elevar la voz o soltar improperios!....
La fórmula funcionaría si la historia como mínimo tuviera atractivo, pero sinceramente, poco queda ya de la frescura de aquella primera parte y la poquísima de la segunda, todo ya éxitos de otrora.  Johnny Depp está tan acomodado en su enriquecedor papel de Sparrow que sus muecas son ya delatoras y su energía se agota, quemando a un personaje que lo tenía todo para ser un referente y se está convirtiendo poco a poco en uno de los más odiosos del panorama actual.
Ni me atrevo a comentar que la sobrevalorada Penélope Cruz inunda su personaje de un impersonal carácter, y su desacertado trabajo debe ser enterrado junto a casi toda su filmografia por completo. Lo más disfrutable de esta eterna aventura son las ganas y la paciencia que el espectador pueda tener de pasárselo bien, pero os prometo que si no vais con las pilas cargadas a tope, seréis incapaces de seguir el atropellado éxtasis fiestero de estos piratas incansables.
Yo he aguantado el metraje estoicamente, pero sería incapaz de volver a verla ni que pasen 15 años, porque necesito descansar de piratas barbudos pretendidamente irónicos. Ni la esperada aparición de un apropiado Óscar Jaenada me ha servido de tentempié para gozar la película, que más que otra sensación, me ha dejado agotado de pies a cabeza.
En fin, recomendable a quién ya le gustaron las otras tres porque es más de lo mismo, pero quizás sea incluso peor que aquella tercera e innecesaria parte. Seguro que cuenta con legiones de seguidores amantes de esta peripecia cómica tan infantil, pero yo me declaro más en contra que a favor de exprimir esta franquicia, que debería haber acabado con honores con su aún digna segunda parte.
Me retiro de este análisis y espero que vuestra experiencia sea más positiva que la mía, porque quizás estoy muy mayor para estos derroteros.

4 comentarios:

  1. De todas cuantas entregas ha tenido esta franquicia, la última, en la que Pe ha sido cómplice es, con mucho, la peor. Y mira que la 2 y la 3 eran malas. Pero es que esta es insufrible, aburrida, pretenciosa y ridícula.
    Sólo se salva la primera: La Maldición de la Perla Negra.

    ResponderEliminar
  2. Me parece que ya la saga tendria que haber llegado a su fin, Jack era un buen personaje pero todo tiene un limite y a veces los de hollywood no le ven el fin a sus negocios...
    Mas de lo mismo

    ResponderEliminar
  3. Para mi la pelicula no esta mas, es un paso mas en la saga de los piratas modernos, me gusto y me parecio entretenida. Respecto a lo de Penelope, en este pais estamos acostumbrados a tirar por tierra a nuestra propia gente.

    ResponderEliminar
  4. Por alusiones, verás que en el blog (si nos sigues con cierta frecuencia) somos bastante objetivos con las interpretaciones de los actores, ya sean húngaros, norteamericanos o españoles.
    Su nacionalidad no es un condicionante, simplemente valoramos el trabajo actoral desde nuestro humilde punto de vista. Actores como Tosar, Bardem, Homar siempre se llevan elogios, pero maniquíes sin alma, vengan de donde vengan (o sino, mirate nuestra reseña de The Tourist) que se cuelan en superproducciones por acuerdos comerciales no merecen una valoración positiva, ya que no hacen creíbles a sus personajes. En el film que comentamos de Piratas 4, hay una malformacion de su personaje hasta tal punto que algunas escenas no las rodó ella, sino su hermana. No hay más pruebas, señoría.

    ResponderEliminar