Quien tenga entre 30 y 40 años dificilmente ha escapado de la influencia de las obras de grandes realizadores como Steven Spielberg (E.T, La saga de Indiana Jones, Jurassic Park, La lista de Schindler, Tiburón, etc...) o James Cameron (Terminator I y II, Aliens el regreso, Abyss, etc...).
Por lo que no es extraño plantearse si al pasar a estar ellos detrás de las cámaras, su obra se ha visto de alguna forma influenciada por las películas que más disfrutaron en sus años mozos.
La película de la que vamos a hablar un poco hoy, al menos nos deja algunas respuestas en cuanto a la persona de James Cameron, fantástico director nacido en 1954, curiosamente el mismo en que llegó a los cines La humanidad en peligro. Seguramente debió verla en alguna reposición en televisión o en uno de los cines de barrio a lo largo de su juventud, pero lo que no podemos negar es que algo quedó profundamente grabado en su retina, para que en 1986 al aceptar rodar la secuela de Alien (1978), le rindiera un más que identificable homenaje en la mayor parte de su trama. Pero hablemos un poco del original que ya tendremos tiempo de realizar las comparaciones de turno después.
La pequeña en pleno desierto... |
Inspeccionando el interior de la caravana destruida... |
El elegido de trasladarla a la gran pantalla fue Gordon Douglas, un trotamundos de la dirección que a lo largo de su carrera supo adaptarse a todo tipo de encargos que fueron pasando por sus manos, llegando a rodar casi un centenar de obras, tocando los más variados géneros. Desde el cine de aventuras, westerns, musicales, cine negro, donde destacan La gran amenaza (1948) y Corazón de hielo (1950) con el gran James Cagney en uno más de sus papeles de despiadado gángster; adentrándose también en la ciencia ficción en la cinta que hoy pasamos a comentar.
Y por fin, el causante de todo se muestra... |
Abriéndose paso dentro del hormiguero... |
Quemadlo todo... sobre todo los huevos... |
A pesar de ser una película que no contó con un gran presupuesto (es el típico producto de serie B de esos años), fue nominada al Oscar en el apartado de efectos especiales en 1954, demostrando la eficacia de las maquetas de las hormigas gigantes (hoy se las ve simplonas, pero simpáticas), así como los inquietantes efectos sonoros. Logrando crear siempre una tensa atmósfera tanto en el siempre amenazante desierto de Arizona como en los oscuros túneles bajo la ciudad.
La parte central del film es la más "aburrida" (a pesar de que está bien realizada y estructurada en todo momento, no digo lo contrario). Pero pasamos de la gran acción y geniales escenas en el interior del hormiguero del desierto a un continuo ir y venir a despachos, donde se plantea a las autoridades pertinentes los peligros potenciales de la situación; y una serie de interrogatorios de posibles testigos que han visto hormigas gigantes. Siendo unos minutos donde desgraciadamente no disfrutaremos de ningún tipo de acción destacable, más que seguirle el rastro a las reinas que escaparon del desierto.
Sin embargo, para los últimos minutos tendremos nuestra recompensa con la entrada en juego del ejército al nido de las hormigas en el subsuelo de la ciudad de Los Angeles y el consiguiente enfrentamiento final entre humanos y los insectos, regalándonos una serie de escenas que nos remitirán mucho al film de Cameron, como he comentado antes.
El ejército contra las hormigas soldado en el subsuelo de Los Angeles... |
La entrada de las tropas al nido armados con lanzallamas, su búsqueda de la reina, la escena donde queman los huevos de la colonia, las escenas donde el Dr. Metford trata de convencer a las autoridades del peligro real podríamos buscarle su paralelismo con el desesperado intento de la teniente Ripley de hacer ver a los responsables que la han rescatado de su letargo espacial, del peligro que corren los colonos. Y así seguiríamos con más detalles del especial "homenaje" que Cameron rindió a Them!.
Se trata de una obra muy disfrutable, que hará las delicias de los amantes del cine clásico de ciencia ficción, que además cuenta con unas actuaciones bastante decentes. Por encontrarle algún pero, destacaría principalmente una falta de coherencia en el paso del tiempo entre varios hechos del film, con unos saltos de meses que creo que no quedan bien explicados, pudiendo dar lugar a cierta confusión. Por supuesto tenemos moraleja final anti-nuclear, intentado concienciar al público de los peligros de las pruebas nucleares. Pura serie B de los 50...
Nunca he llegado a verla, pero después de leer tu crítica, no tardaré en remediar eso.
ResponderEliminarLo has descrito perfectamente. Para mi es una de las mejores de aquellos años, en lo que a la ciencia ficción se refiere.
ResponderEliminarSoy un devorador de todas estas cintas, donde sin dudad están las mejores del género.
http://wwwopinasiteatreves.blogspot.com.es/
Vista y disfrutada, sobre todo, como dices, los primeros minutos en el desierto. Una cinta sencilla y que en ningún momento deja de ser honesta con lo que es, pura ciencia ficción de los 50 con hormigas gigantes. A mi en cambio la escena final me ha dejado algo frío, ya que sobre el papel me había parecido más intensa y he visto un mínimo de resistencia "hormiguil".
ResponderEliminarClaramente inspiró a Cameron....si es que está todo inventado...