PAGES

lunes, 8 de octubre de 2012

ENTREVISTA: Pen-ek ratanaruang

Aquí os dejamos la entrevista aparecida en el diario del Festival de Sitges con el director de esta Headshot:

Es asombroso ver los puntos en común que tienen España y Tailandia en cuanto a corrupción se refiere. ¿Nos recomienda hacer como el protagonista del Headshot y empezar a tomarnos la justicia por nuestra mano?
[Risas] Desde luego que no, nadie debería hacer algo así. Aunque es cierto que a mucha gente le gustaría,
sobre todo cuando uno se siente desamparado por su país...
Pero no creo que sea una buena idea... ¡Es solo una película!

Headshot está a medio camino entre el thriller y el drama. ¿Ha querido enmarcar el filme dentro de algún género en concreto?
Queríamos hacer una película de cine negro a la antigua, como el cine clásico americano, donde la violencia no era tan explícita. En realidad, si os fijáis, no soy especialmente bueno dirigiendo acción, no es algo que me interese demasiado, y este fue uno de los motivos de tener que representar la violencia de una forma tan real e inesperada. Si bien es cierto que no hay un referente concreto, tal vez películas como Retorno al pasado o Perdición nos sirvieron para abordar el tono que queríamos darle al filme, aunque no tengan
nada que ver, sobretodo formalmente, con nuestra película.

¿Es un hecho habitual convertirse en monje en Taliandia cuando alguien quiere redimir sus pecados?
En Tailandia a menudo se utiliza el budismo de manera equivocada.
La gente piensa que para limpiar sus pecados basta con meterse a monje. Incluso si no se tiene trabajo o si se muere alguien cercano. La película intenta reflejar que esa no es la manera de arreglar las cosas. Hace sesenta o setenta años, uno se hacia monje para recibir una educación, porque básicamente no había
escuelas, pero no para redimir sus pecados.

Sus películas no suelen ser de fácil digestión para el gran público.
En Tailandia, ¿cómo es su posición como director dentro la industria? ¿Cómo es el proceso de financiación de sus películas?

Mi posición en la industria es la de alguien famoso por no hacer dinero con ninguna de sus películas.
Sin embargo, creo que, como fui de los primeros que realmente empezó a hacer cine independiente en Tailandia, soy muy respetado por las nuevas generaciones de cineastas. Sobre la financiación, cada vez es más difícil. Mi productor se ve obligado a buscar el dinero fuera y en las últimas cuatro o cinco películas hemos hecho coproducciones con otros países, recibiendo dinero de lugares como Francia, Suecia,
Holanda e incluso, alguna vez, de España o Portugal.

Siempre hemos tenido curiosidad por saber cómo rodó el plano secuencia que abre Nymph.¿Cómo...? [Silencio] Fue muy complicado. [Risas] Se utilizó una combinación de steadycams, grúas y muchísimos trucos para conseguir ese plano. La grúa más grande tuvimos que meterla en un gran agujero en la tierra del bosque para que estuviera escondida en el momento justo en que el personaje se dirigía hacia el río. El operador iba saltando de una grúa a otra y luego bajaba al suelo en un plano de ocho minutos
que tardamos tres días en rodar. Fue tan intenso para mí que, en el momento de rodar, preferí casi
ni mirar, que pasara lo que tuviera que pasar. Fue muy divertido pero complicado a la vez. No lo volvería a hacer. Ya he aprendido la lección.

No hay comentarios:

Publicar un comentario