PEPPERMINT CANDY (1999)

Kyung-gu Sol es un hombre de mediana edad que se despierta en la orilla de un río donde se celebra una reunión de antiguos estudiantes. Trajeado pero totalmente borracho, la emprenderá con sus antiguos amigos con una actitud totalmente desquiciada e irracional, incomodando a todo el mundo. Su enajenación será tal que se acabará subiendo a las vías del tren que cruzan el río, poniendo en peligro su vida con la inminente llegada de un tren.
¿Qué le pasa a Kyung-gu Sol para actuar así? Para tener la respuesta completa, Peppermint Candy nos relatará los 20 años anteriores a este momento, con un montaje muy cuidado retrocediendo en su pasado y haciendo varias paradas en su vida, que nos permitirán conocer y saber como ha llegado a estos extremos este hombre totalmente abatido y destruido como persona.
Con cada retroceso en el tiempo, también veremos como el tren va para atrás o entra en una bifurcación para contar con una bonita alegoría una decisión crucial en su vida o un cambio definitivo. Veremos siete episodios que marcaron la vida de Kyung-gu Sol: la infidelidad de su mujer, su ruina económica o su pasado como policía maltratador, son algunos de estos episodios que nos irán haciendo el retrato completo de nuestro personaje y nos ayudarán a ir entendiendo su gradual degradación.

Peppermint Candy empieza de una forma muy desconcertante, pues la escena inicial es incómoda de ver y tiene un cierto toque surrealista que nos deja un poco descolocados. Sin embargo, el guión está muy bien trazado y nos exigirá de un poco de paciencia para que con cada nuevo retroceso en el tiempo poder encajar una nueva pieza en el rompecabezas que es la vida de Kyung-gu Sol.
Hay que reconocer la buena mano que tiene el director Chang Dong para contar una historia en la que muchas explicaciones las recibimos cuando menos lo esperamos o cuando ya ni nos acordábamos de que ese hilo que había quedado abierto, dando una respuesta de causa-efecto muy bien lograda y que acabará cerrando una historia convincente, dura y muy triste.
Una historia que resume las miserias con que nos puede golpear a todos en cualquier momento la vida, para poco a poco arruinarnos todas las esperanzas y las ganas de vivir.
Muy aconsejable.